La empresa Top Gun liderada por Walter Antelo fue reconocida en la feria Agro Vidas 2025 por presentar la nueva generación de drones agrícolas que integran sistemas de monitoreo, fertilización y fumigación inteligente. Esta tecnología no solo optimiza los rendimientos y reduce el impacto ambiental, sino que también impulsa la reforestación y genera nuevos empleos tecnológicos en el agro nacional.
La revolución tecnológica aterriza en Agro Vidas 2025
En el marco de la feria Agro Vidas 2025, uno de los eventos más importantes del sector agropecuario en Bolivia, se presentó una de las innovaciones más destacadas de la temporada: la nueva generación de drones agrícolas, capaces de transformar la forma en que se trabaja la tierra.
El representante de la empresa galardonada, Walter Antelo, expresó su orgullo por recibir el reconocimiento y destacó que “ya no se puede hablar de drones como el futuro del agro, sino como el presente que está haciendo nuestro campo más competitivo y productivo”.
Drones que piensan y actúan con precisión
Durante la exposición, Antelo explicó que los drones de última generación integran todo un sistema de agricultura de precisión, que permite al productor monitorear sus cultivos, detectar plagas o deficiencias de nutrientes y realizar aplicaciones fitosanitarias de forma sectorizada.
“Con esta tecnología podemos determinar el estado del cultivo, aplicar solo donde se necesita y reducir el impacto ambiental”, afirmó.
El modelo FP700, presentado por la empresa, cuenta con un tanque de 60 litros para líquidos y otro de 80 litros para sólidos, un radar de seguimiento de terreno con alcance de 150 metros, y boquillas bifurcadas capaces de aplicar 40 litros por minuto con partículas ajustables entre 30 y 500 micras. Además, posee autonomía continua gracias a su sistema de recambio de baterías.
Tecnología que ahorra recursos y protege el medio ambiente
Los beneficios no se limitan al rendimiento productivo. Según Antelo, esta tecnología logra un ahorro económico significativo y una reducción del impacto ambiental, al utilizar los recursos de forma más eficiente y minimizar la exposición química.
En ese sentido, la empresa mantiene un convenio con la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM) para desarrollar un programa de reforestación en la Chiquitania, utilizando drones para sembrar semillas nativas y acelerar la recuperación de los bosques afectados por incendios.
“Con drones podemos reducir el tiempo de recuperación de un bosque de 150 a 50 años”, explicó el representante.
Innovación que genera empleo y oportunidades
Además de los beneficios ambientales y productivos, el avance tecnológico también abre nuevas oportunidades laborales. La operación de drones agrícolas requiere profesionales capacitados, lo que impulsa la formación técnica y la creación de empleos vinculados a la tecnología de punta aplicada al agro.
“Esta es una herramienta que complementa el trabajo humano. No reemplaza, sino que transforma los métodos tradicionales y genera empleo calificado”, aseguró Antelo.
Bolivia, rumbo a ser un referente regional en agro-tecnología
El auge del uso de drones en el sector agropecuario boliviano ya es una realidad. Su incorporación masiva en campañas de verano ha generado una demanda creciente, superando incluso la oferta disponible.
“Estamos agradecidos con el agro boliviano. Los drones están aquí para quedarse y convertirnos en un referente latinoamericano en agricultura de precisión”, concluyó Antelo.
Con avances como estos, Bolivia da un paso firme hacia un modelo agrícola más eficiente, sostenible y tecnológicamente avanzado, demostrando que la innovación también germina en el campo.
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