¿5G plantea riesgos para la salud?

La red móvil 5G se ha activado en algunas ciudades del Reino Unido y ha generado dudas sobre si la nueva tecnología presenta riesgos para la salud.

¿Cuáles son las preocupaciones y hay alguna evidencia que las respalde?

¿Qué tiene de diferente el 5G?

Al igual que con las tecnologías celulares anteriores, las redes 5G dependen de señales transmitidas por ondas de radio, parte del espectro electromagnético, transmitidas entre una antena o mástil y su teléfono.

Estamos rodeados de radiación electromagnética todo el tiempo, de señales de televisión y radio, así como de toda una gama de tecnologías, incluidos los teléfonos móviles, y de fuentes naturales como la luz solar.

5G utiliza ondas de frecuencia más altas que las redes móviles anteriores, lo que permite que más dispositivos tengan acceso a Internet al mismo tiempo y a velocidades más rápidas.

Estas ondas viajan distancias más cortas a través de espacios urbanos, por lo que las redes 5G requieren más mástiles transmisores que las tecnologías anteriores, ubicadas más cerca del nivel del suelo.

¿Cuáles son las preocupaciones?

La radiación electromagnética utilizada por todas las tecnologías de telefonía móvil ha llevado a algunas personas a preocuparse por el aumento de los riesgos para la salud, incluido el desarrollo de ciertos tipos de cáncer.

En 2014, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que “no se han establecido efectos adversos para la salud como causados ​​por el uso del teléfono móvil” .

Sin embargo, la OMS junto con la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) ha clasificado todas las radiaciones de radiofrecuencia (de las cuales forman parte las señales móviles) como “posiblemente cancerígenas”.

Se ha puesto en esta categoría porque ” hay evidencia que no llega a ser concluyente de que la exposición puede causar cáncer en humanos “.

Comer verduras en escabeche y usar talco se clasifican en la misma categoría.

Las bebidas alcohólicas y la carne procesada están en una categoría más alta porque la evidencia es más fuerte.

Un informe de toxicología publicado en 2018 por el Departamento de Salud de EE. UU. , señalado por aquellos que expresan preocupaciones de seguridad, encontró que las ratas macho expuestas a altas dosis de radiación de radiofrecuencia desarrollaron un tipo de tumor canceroso en el corazón.

Para este estudio, los cuerpos completos de las ratas estuvieron expuestos a la radiación de los teléfonos móviles durante nueve horas al día todos los días durante dos años, comenzando antes de que nacieran.

No se encontró vínculo de cáncer para las ratas hembras o los ratones estudiados . También se descubrió que las ratas expuestas a la radiación vivieron más que las del grupo de control.

Un científico de alto rango en el estudio dijo que “las exposiciones utilizadas en los estudios no se pueden comparar directamente con la exposición que experimentan los humanos cuando usan un teléfono celular”, incluso para los grandes usuarios.

El Dr. Frank De Vocht, que ayuda a asesorar al gobierno sobre la seguridad de los teléfonos móviles, dice que “aunque parte de la investigación sugiere una posibilidad estadística de un mayor riesgo de cáncer para los grandes usuarios, la evidencia hasta la fecha de una relación causal no es suficientemente convincente como para sugerir la necesidad acción precautoria “.

Sin embargo, hay un grupo de científicos y médicos que han escrito a la UE pidiendo que se suspenda el lanzamiento de 5G.

Las ondas de radio no son ionizantes

La banda de ondas de radio, utilizada para redes de telefonía móvil, no es ionizante, “lo que significa que carece de energía suficiente para romper el ADN y causar daño celular”, dice David Robert Grimes, físico e investigador del cáncer.

Más arriba en el espectro electromagnético, mucho más allá de las frecuencias utilizadas por los teléfonos móviles, existen riesgos claros para la salud por la exposición prolongada.

Los rayos ultravioletas del sol caen dentro de esta categoría dañina y pueden provocar cánceres de piel.

Existen estrictos límites de advertencia para la exposición a niveles de radiación de energía aún más altos, como los rayos X médicos y los rayos gamma, que pueden provocar efectos dañinos en el cuerpo humano.

“Las personas están comprensiblemente preocupadas sobre si podrían aumentar su riesgo de cáncer, pero es crucial tener en cuenta que las ondas de radio son mucho menos enérgicas que incluso la luz visible que experimentamos todos los días”, dice el Dr. Grimes.

“No hay evidencia confiable”, dice, “de que los teléfonos móviles o las redes inalámbricas nos hayan causado problemas de salud”.

¿Deberíamos estar preocupados por los mástiles transmisores 5G?

La tecnología 5G requiere muchas estaciones base nuevas: estos son los mástiles que transmiten y reciben señales de teléfonos móviles.

Pero crucialmente, debido a que hay más transmisores, cada uno puede funcionar a niveles de potencia más bajos que la tecnología 4G anterior, lo que significa que el nivel de exposición a la radiación de las antenas 5G será menor.

Las directrices del gobierno del Reino Unido sobre estaciones base de telefonía móvil dicen que los campos de radiofrecuencia en lugares normalmente accesibles al público están muchas veces por debajo de los niveles de referencia .

¿Qué pasa con los peligros de calentamiento?

Parte del espectro 5G permitido según las pautas internacionales se encuentra dentro de la banda de microondas.

Las microondas generan calor en los objetos a través de los cuales pasan.

Sin embargo, en los niveles utilizados para 5G (y tecnologías móviles anteriores) los efectos de calentamiento no son dañinos, dice el profesor Rodney Croft, asesor de la Comisión Internacional de Protección contra la Radiación No Ionizante (ICNIRP).

“El nivel máximo de radiofrecuencia al que alguien de la comunidad podría estar expuesto por 5G (o cualquier otra señal en áreas comunitarias generales) es tan pequeño que no se ha observado un aumento de temperatura hasta la fecha”.

Límites a la exposición

El gobierno del Reino Unido dice que “si bien es posible un pequeño aumento en la exposición general a las ondas de radio cuando se agrega 5G a la red existente, se espera que la exposición general permanezca baja”.

El rango de frecuencia de las señales 5G que se introducen está dentro de la banda no ionizante del espectro electromagnético y muy por debajo de las consideradas dañinas por el ICNIRP.

“La exposición que producirá 5G ha sido considerada en gran profundidad por ICNIRP, con las restricciones establecidas muy por debajo del nivel más bajo de frecuencia de radio relacionada con 5G que se ha demostrado que causa daño”, dice el profesor Croft.

La OMS dice que las exposiciones a frecuencias electromagnéticas por debajo de los límites recomendados en las pautas de ICNIRP no parecen tener ninguna consecuencia conocida sobre la salud.

Imagen: Los Tiempos

Fuente: BBC