Los memes contienen el sentido del humor y la opinión de sus creadores, y en época electoral son un instrumento más en la lucha política por adhesiones y votos. Esto implica que las redes sociales digitales se han convertido también en escenario de lucha política.
Esas son algunas de las ideas transmitidas por Marcelo Guardia, quien junto a María Teresa Zegada y Alex Ojeda han trabajado en la investigación La vida política de meme – Interacciones digitales en Facebook en una coyuntura crítica.
Guardia y Zegada participaron del Foro “Comunicación, poder y nuevas tecnologías”, organizado por la Universidad Evangélica Boliviana, en la ciudad de Santa Cruz, donde compartieron tanto los resultados de su investigación como sus respectivos análisis sobre la comunicación política en el este momento electoral en el país.
Marcelo Guardia explica que, a diferencia de los medios de comunicación que emiten un mensaje que se difunde de manera vertical hacia los receptores, en las redes sociales existe el rebote y las conexiones entre personas. “A los medios de comunicación les puedes obligar a decir la verdad porque es su función; a las redes sociales, no, porque no son medios institucionales. A las redes no podemos exigirles nada porque son conexiones entre personas, y las personas tienen opinión, y las opiniones no contienen necesariamente la verdad”.
Y los memes son la expresión sea de grupos de personas o de individuos que construyen mensajes. El uso del humor y la capacidad de generar emociones son dos atributos de esos memes que circulan en la Internet.
¿Pero importa quiénes hacen los memes? Guardia dice que la autoría del meme es un hecho secundario: “Las redes usan memes que están sacados de la realidad. Quién lo hizo, no sabemos, no importa, pero está diciendo algo que conecta con el imaginario, la opinión o la expectativa de determinado público que, cuando está de acuerdo, agarra y lo rebota. En las redes el éxito de un mensaje depende de la inteligencia colectiva”.
A su vez, María Teresa Zegada explica que los memes, nombre acuñado por Richard Dawkins para referirse a memoria, son la expresión de que la sociedad ha pasado de la política argumentativa a la producción de mensajes cortos, visuales y altamente emocionales. Es además “una unidad de información cuyo impacto y veracidad no interesa, no depende del productor del meme, sino de cómo ese meme circula, es comentado y adquiere vida propia”.
En las reacciones provocadas por un meme es que puede verse que no existe una total banalidad detrás de las redes sociales, sino personas con opinión y en ejercicio de esas libertades entregadas por los derechos humanos.
El mensaje
Guardia también puso énfasis en el mensaje central dominante que existe en esta época electoral. Si el discurso en pasados años era proceso de cambio versus neoliberalismo, ahora se puede decir que los ciudadanos se ven interpelados a elegir entre la estabilidad versus la incertidumbre, por lo menos así está estructurado el discurso que pone como ejemplo a Argentina, principalmente, sobre lo que podría pasar si se le ocurre a la sociedad cambiar de gobernantes.
Todo es mensaje hacia los lectores, oyentes, televidentes y consumidores de redes sociales. Desde la adopción del perro Ringo hasta la llegada a la Chiquitanía para expresar dolor al ver las cenizas de los incendios, cosas que hicieron los dos principales candidatos a las elecciones generales, todo está diciendo “voten por mí”.
Fuente: Pieb
No hay comentarios.:
Publicar un comentario