La desinformación ha sido tradicionalmente un elemento clave de la manipulación político-ideológica en el sistema de educación cubano, pero en la era de internet y las tecnologías de la información y la comunicación es imposible para cualquier régimen totalitario controlar todo lo que consumen los niños y jóvenes. El resultado se hace más evidente año tras año en las aulas cubanas. Aunque la carga de adoctrinamiento se mantiene, los estudiantes reaccionan a las mentiras, y los maestros, cada vez menos convencidos, se quedan sin argumentos.
"Cuando los profesores dicen barbaridades, como que 'Estados Unidos es un país malo porque hay capitalismo' y 'Cuba es el bueno porque hay socialismo', el aula se va debajo de la risa", comenta Inés María, madre de Leandro, un alumno holguinero de noveno grado.
"El otro día me contó que un alumno le dijo al de Cívica: 'Profe, por favor, si esto está más malo cada día y lo que queremos es irnos para EEUU'. Y el profesor se viró y dijo: 'Ustedes apréndanse el contenido para la prueba, que es así como se lo vamos a evaluar. Olvídense de la realidad, de lo que pasa de la puerta para afuera. Aquí, en el aula, la verdad es esta, porque si no se lo aprenden, desaprueban. ¿Comprendieron?'. Y entre risas, incluso del propio profesor, todos decían: 'Ok, profe, nos lo vamos a aprender'. Es un choteo", relata Inés María.
Según Susana, madre de Paola, estudiante de primaria, "la maestra les dio una clase con una poesía sobre Che, esa que dice que 'nació en Argentina con una estrella en la frente'. Después de darles muchas explicaciones sobre sus proezas y méritos, terminó preguntándoles ¿por qué los niños deberían ser como el Che?".
"Y un niño levantó rápido la mano y respondió: 'porque era extranjero, nació en Argentina'. Todos los padres, y hasta la maestra, nos tuvimos que reír. Es que los niños saben que para tener algo la única forma es irse para otro país, y que ser extranjero es mejor que ser cubano. Es una realidad que ellos crecen viendo, y no se puede tapar el sol con un dedo, mucho menos con muela".
Muchos niños y jóvenes cubanos de hoy son menos vulnerables a la manipulación ideológica que los de generaciones pasadas, de la era analógica. Se vuelve imposible para los profesores convencerlos de que Cuba es un país con un proyecto social maravillosos llamado "Revolución", que es como se vende la dictadura del Partido Comunista. Mucho menos de que serán ellos los protagonistas del desarrollo del país. "Lo que quieren es irse. Solo hablan de eso", afirma Yosbany, un profesor de Educación Física en un preuniversitario de Holguín.
"Las hembras tienen sus noviecitos en la escuela, pero solo piensan en conseguir un novio cubanoamericano, esa es su idea. Y las que lo han logrado, tienen de todo y son las heroínas del grupo y de sus familias. Solo quieren que las saquen de Cuba, o al menos que las mantengan desde allá con dólares, que es lo que vale aquí", agrega.
Fuente: Diario de Cuba
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