Hoy, más que nunca, los periodistas enfrentan múltiples retos. Deben enfocarse en producir contenido de calidad mientras piensan cómo visualizar de la mejor manera su información. Deben estar muy atentos a cualquier dato disparador y, en simultáneo, asumiendo roles de administradores, buscar fondos para financiar sus proyectos. Apenas están aprendiendo cómo optimizar sus publicaciones en redes sociales y, como si nada, se dan cuenta de que la inteligencia artificial ya se asoma. Deben velar por su seguridad ante amenazas inminentes, físicas y digitales, ya que nadie se hace responsable. Y, por si fuera poco, deben bregar permanentemente para que los gobernantes y los funcionarios de oficinas estatales suelten, como si fuera un gran favor, migajas de información que debiera ser pública.
Un equipo periodístico de La Nube participó del 11° Festival Gabo en Bogotá, Colombia, entre el 30 de junio y el 2 de julio de 2023. Luego de haber escuchado a destacados periodistas investigadores de Iberoamérica, en este artículo compartimos algunas ideas y lecciones sobre cómo hacer mejor periodismo y reflexiones sobre este oficio.
1. El periodista debe estar instalado en una cultura de constante cambio
En el periodismo actual hay cambios por doquier. Los géneros periodísticos son los menos afectados; los formatos son los que más evolucionan. Lo que siempre está ahí, o allá, es una historia, con sus personajes, por supuesto. ¿Cómo contarla? ¿Cómo hacer la reportería? ¿Qué estrategia de publicación adoptar? ¿Cómo actuar ante formas de trabajo que mutan permanentemente?
La editora de storytelling y capacitación de The New York Times, María Sánchez Díez, advierte que la dinámica de cambios constantes en el periodismo no va a terminar. Por ello, propone que los periodistas deben estar instalados en esa cultura de cambio.
2. Contar historias de forma creativa para audiencias agotadas
Antes, la “vida útil” de una noticia era de 24 horas. El periódico diario contenía la información más relevante del día anterior. Eso fue cambiando con los noticieros de radio y televisión con dos o tres actualizaciones por día. Con el advenimiento e instalación definitiva del Internet en el ecosistema mediático, y con una apropiación creciente de los periodistas y los medios de las herramientas digitales, las actualizaciones llegaron a ser más frecuentes. Hoy, es posible hablar de noticias y contenidos que, literalmente, se actualizan cada segundo.
Solo hablando del área digital, existe una amplia oferta de contenidos —mezclados entre servicios de streaming, noticias, opiniones en redes sociales, memes, reportajes, etc.— y los periodistas deben competir, por decirlo de alguna forma, con esa sobreabundancia temática y de productos. Como antídoto, la periodista hondureña Jennifer Ávila, sugiere apostar por la innovación. “Las audiencias nos están diciendo que están agotadas. Hay que contar las historias de forma creativa, hay que innovar”, dijo en una charla organizada durante el primer día de Festival. Ávila es directora editorial y cofundadora del medio digital Contracorriente y este 2023 recibió el Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo.
3. Adelantarse al algoritmo
Tradicionalmente, el periodismo se ha movido entre agendas. Y en términos sencillos hay dos: la de los gobiernos, la de los poderosos y la de los medios y periodistas que proponen temas, que investigan y que no dejan que se imponga la agenda del poder político, económico o cualquiera que sea. Esa lucha dicotómica que otrora se libraba en medios de comunicación tradicionales, desde la última década se ha trasladado al escenario digital. En una época dominada por algoritmos y en la que las cortinas de humo o la desinformación pueden viralizarse más que un reportaje, los periodistas deben estar preparados.
Como una posible solución, la periodista colombiana Olga Lucía Lozano afirma que es obligación del periodismo y de los periodistas que el algoritmo ajeno no nos domine. “Quien no tiene una estrategia es preso de la estrategia del otro”, ensayó Lozano en una charla del Festival Gabo 2023.
4. ¿Para quién escriben los periodistas?
No hay una respuesta única para la pregunta “¿para quién escriben los periodistas?”. Lo lógico y sencillo sería decir que para los lectores. Pero es una interrogante más compleja de lo que parece. Para Olga Lucía Lozano, antes de cualquier definición hay que demostrarle a la gente —lectores, radioescuchas, televidentes y otros perfiles de consumidores de información periodística— “que puede confiar en nosotros como periodistas”.
La hondureña Ávila cree que un buen punto de partida es saber cómo se está comunicando la gente y para dónde van las narrativas predominantes. Desde su experiencia, es necesario segmentar las audiencias dependiendo los temas que se trabajen y, a partir de eso, evaluar qué formatos usar. Es decir, debemos dejar de pensar que al público (audiencias, lectores, etc.) le interesa un mismo tema y que consumen información periodística en un solo formato.
Por otra parte, el escritor y periodista argentino Martín Caparrós, autor de una treintena de libros de ficción y no ficción, cree que no hay subestimar a la gente que consume periodismo. Durante una entrevista que le hizo la periodista colombiana María Teresa Ronderos el 2 de julio, Caparrós reveló que cada vez que escribe lo hace asumiendo que los destinatarios son personas más inteligentes que él mismo. Esa es su manera de respetar al público.
¿Para qué sirve lo que hacemos?, se preguntó Jennifer Ávila durante su discurso tras recibir el Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo 2023. “Para salvar la memoria, la impunidad del poder busca acabar con la memoria, la de un expediente, la de un pueblo, la de las luchas, la de la dignidad”.
5. El periodismo en la región está en situación de vulnerabilidad
Los medios de comunicación y periodistas están en situación de vulnerabilidad. Cada día es más frecuente escuchar discursos y ataques de gobernantes y poderosos contra miembros de la prensa. El 1 de julio de 2023, la periodista mexicana Carmen Aristegui, en un conversatorio del 11° Festival Gabo, comentó que muchas veces es difícil hacerle saber a la sociedad para qué están los periodistas, porque existe todo un aparato, estatal en la mayoría de los casos, que busca desprestigiarlos de manera constante. “Es apabullante la narrativa del Poder que tiene una maquinaria grande contraria al periodismo”, explicó.
Según el Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Pedro Vaca, cuando se habla de libertad de expresión debemos referirnos a las condiciones que dan los Estados democráticos para ello. Un ejemplo contrario puede ser lo que sucede en Venezuela, según la periodista Ronna Rísquez. Durante el último día del Festival Gabo 2023, Rísquez contó que en su país, Venezuela, hay censura y que los medios digitales son bloqueados y que otros medios han cerrado sus puertas.
Al respecto, hay 11 países de América Latina por debajo del puesto 100 en un ranking de Reporteros Sin Fronteras (2023) sobre libertad de prensa. Bolivia está en el sitial 117, Nicaragua en el 158, Venezuela en el 159, Honduras en el puesto 169 y cierra la lista latinoamericana Cuba en el lugar 172. En todos esos países se ha denunciado a lo largo de las últimas décadas ataques a la prensa y se han dado cierres y embargos a medios de comunicación. Solo en Bolivia, a lo largo de 2022, según un Informe de UNITAS, se registraron 175 casos de vulneraciones a la libertad de expresión y agresiones directas a periodistas y trabajadores de medios de comunicación.
6. Ante funcionarios que se sienten con el derecho de no contestar, persistir
En Bolivia, los derechos de petición, de acceso a la información pública, de solicitar, acceder y recibir información pública completa, adecuada, oportuna y veraz, sin más requisito que la sola identificación del peticionario, están reconocidos en la Constitución Política del Estado, el decreto supremo 28168 de 17 de mayo de 2005 y la Ley 974 de Unidades de Transparencia y Lucha contra la Corrupción. Sin embargo, la realidad es diferente y las respuestas, de parte del Estado y de los funcionarios públicos, escasean; y cuando las dan, son incompletas, poco claras o cuestionan los fines para los cuales los periodistas solicitan la información.
Durante la charla “Investigar el Poder”, una de las últimas actividades del Festival Gabo 2023, el periodista Lorenzo Morales criticó esta situación que es un común denominador entre los gobiernos de la región. “Cada vez nos damos cuenta de que hay mucho silencio de parte de funcionarios públicos pese a las peticiones de información. Se sienten con el derecho de no contestar”.
Pero pese a esa práctica a la que están acostumbrados quienes ganan su sueldo con los impuestos de la gente, la recomendación de varios periodistas es persistir, persistir y persistir.
7. El cierre de un medio significa reducción de espacios para la libertad de expresión
El cierre del periódico Página Siete, oficializado el 29 de junio de 2023, remeció a la opinión pública en Bolivia. El presidente del directorio de ese medio, Raúl Garáfulic Lehm, calificó como una “tormenta perfecta” la combinación de circunstancias que llevó a ese medio a ese desenlace. Entre las causas de largo plazo, explicó Garáfulic, estuvo el bloqueo sistemático de la pauta publicitaria gubernamental, mecanismos de hostigamiento público contra el medio y sus periodistas y acoso judicial. A ello se sumó la pandemia del Covid 19 y el cambio de los hábitos de lectura, la crisis económica de Bolivia, el precio del papel por la guerra en Ucrania y un sistema de suscripciones que nunca despegó.
Fuente: La Nube
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