Un tono marrón y textura fina caracteriza a las barras de jabón elaboradas con aceite de cocina usado. En Cochabamba, Industrias Richter SRL demostró que se puede convertir un desecho contaminante en un producto útil y de calidad. Hace casi dos años salió al mercado y es reconocido porque en la parte central tiene la inscripción de: “Casero”, la marca del jabón de lavar, de industria boliviana.
El producto tiene como principal elemento el aceite usado de cocina, también contiene sebo de vaca y sosa cáustica. El gerente de la empresa, Christian Richter, calificó al producto como 100 por ciento natural debido a que se caracteriza por rescatar residuos y reutilizarlos. “Hemos hecho los análisis químicos. La calidad se mide a través del ácido graso y nuestro jabón casero tiene la categoría G3, que es igual al de un tocador”.
Comentó que utiliza el aceite usado de cocina en cualquier estado: sucio, vencido y quemado. La industria hace el recojo del aceite a domicilio. Unos entregan en botellas plásticas, otros en las de vidrio e incluso en bidones.
Industrias Richter SRL, en jabonería cuenta con dos marcas: Casero y Zas. El último es un producto con aroma y suavizante para el lavado de la ropa. Entre las características del jabón está que duran por más tiempo, limpian mejor y son más cremosos.
Contaminación
“Una gota de aceite contamina 1.000 litros de agua”, es el lema que recopiló Christian Richter. Aunque reconoció que les hace falta el aceite usado para producir en mayor cantidad. La industria puede almacenar hasta 60 toneladas de esa materia prima por mes. Sin embargo, acopian unos 6 mil litros.
Richter señaló que una gran parte de la población hace un mal uso del aceite. Indicó que en los municipios del Eje Metropolitano de Cochabamba debería quedar para reciclar 6.2 millones de litros por año. De esta cifra 1.8 millones de litros sería por consumo masivo (empresas) y 4.4 millones de litros tendría que provenir de la ama de casa.
Acotó que en Bolivia se producen 73 millones de litros de aceite vegetal virgen y debería quedar un residuo de al menos 37.6 millones de litros.
Añadió que la empresa trabaja bajo tres principios: convertir un desecho en recurso, cuidar el medioambiente y generar empleo.
Al respecto, comentó que al menos 90 mujeres ecorecolectoras trabajan con Richter a las que se les paga en efectivo o pueden canjear cierto monto por productos de limpieza.
Mercado
Richter señaló que el producto se comercializa en Santa Cruz y Cochabamba. Hace poco firmó con una distribuidora cruceña y entregará 10 mil cajas de jabón por mes y en Cochabamba se da una cantidad similar.
Una caja de jabón casero tiene 50 unidades. En el mercado podrá encontrar a un precio de 70 bolivianos. El Zas está a 135 bolivianos, la misma cantidad. En las tiendas se barrio se ofrece la unidad a 2 bolivianos y 3 bolivianos (respectivamente). “Son costos son económicos”.
Intercambio
Industrias Richter SRL tiene el propósito de fomentar el intercambio y concientizar a la población para que con un buen manejo del aceite se pueda salvar el planeta.
La empresa por un litro de aceite usado paga 0.50 centavos. También puede intercambiar la materia prima por productos. Richter cuenta con una variedad de insumos de limpieza como detergente líquido, desinfectante de piso, limpia vidrios, suavizante líquido de ropa, lava vajilla, antigrasa y jabón para ropa. En estos casos el trueque por litro equivale a 1 boliviano.
Swisscontact impulsó varios proyectos para el reciclado del aceite usado. Trabaja en coordinación con Industrias Richter SRL y GreenSide. Ambas dedicadas a recolectar la materia prima. La segunda lo utiliza para la producción de biodiésel.
Inicios
Gerhard Paul Richter de profesión Ingeniero Químico, presidente y fundador de la Industria empezó con la entrega de jabón al Ejército. “Le gustaba realizar algunas mezclas y ahí nació la fórmula. Es excelente”.
En ese entonces, la fábrica producía 1.000 cajas en seis meses. Ahora pueden sacar hasta 400 cajas por día.
Comentó que se secaban los jabones al aire libre. Ahora no es necesario.
Actualmente, seis personas se encargan de la elaboración del jabón.
El aceite usado se tranformará en jabones, biodiésel y aceite agrícola. Una persona consume 12 litros de aceite por año.
Colegios se suman a la campaña de recolección
La campaña “El aceite usado, puede ser reciclado” llega a los colegios con el propósito de recolectar aceite vegetal usado y así impulsar el cuidado del medioambiente. El colegio San Agustín fue uno de los primeros en aceptar el reto.
Christian Richter, gerente de Industrias Richter SRL señaló que al menos 600 familias entregaron el líquido en botellas plásticas, que equivalen a unos 3.000 litros. “Afortunadamente hay buena aceptación de los niños. Más adelante veré de implementar contenedores para acopiar el aceite”.
La iniciativa busca que más unidades educativas se inscriban y se socialice con las familias y vecinos la importancia del acopio.
Los participantes deben guardar el aceite usado en una botella plástica (no importa el tamaño) y luego entregar a la Empresa Municipal de Servicios de Aseo (EMSA) contactándose al 4491888, Richter SRL al 4314700 y 77448888 o GreenSide al 78312506. Richter indicó que recogen el aceite a domicilio, desde un litro e incluso menos.
Ese aceite se transformará en jabones, biodiésel y aceite agrícola.
La actividad es organizada por EMSA, Semapa, Swisscontact y Econvecindarios.
Fuente: Opinion
Es un buen jabon yo lo uso
ResponderBorrar