Cuba vive una situación catastrófica tras 66 años de represión gubernamental, extorsión y exilio. Hoy, una vez más, lejos de aliviar la desesperada situación en que se encuentra el pueblo cubano al carecer de los derechos y servicios más básicos, el régimen de la isla ha incrementado de forma desproporcionada las tarifas telefónicas que controla el monopolio estatal Etecsa, que a partir de ahora deberán ser abonadas en dólares estadounidenses. No se trata tan solo de un tarifazo o súbito encarecimiento de las comunicaciones, sino de la delegación del pago de un servicio público nacional a un exilio que, además, provee lo necesario para cubrir las necesidades básicas de medicina y alimentos a muchos residentes en la isla. Una medida, además, que dejará incomunicados a quienes no cuenten con un familiar en el exterior que pueda pagar las nuevas tarifas.
Por primera vez en décadas, el estudiantado cubano, honrando viejas tradiciones republicanas de participación en los asuntos políticos y sociales, ha alzado su voz ante el atropello, llamando incluso a un paro nacional universitario. Ello lo ha convertido en objetivo de la maquinaria represiva del régimen, que ya ha puesto en marcha una campaña de manipulación informativa, lo que hace esperar que se desate contra ellos una persecución similar a la que se empleó contra las protestas de julio del 2021 por la cual todavía centenares de personas guardan prisión.
Los firmantes de esta carta, académicos e intelectuales de todo el mundo, queremos hacer público nuestro apoyo y solidaridad con el estudiantado de la isla, y hacer un llamado a la comunidad internacional a defender a los estudiantes y profesores de las represalias que están sufriendo por hacer públicos sus reclamos.
Fuente: Change.org
No hay comentarios.:
Publicar un comentario